La Justicia Federal liberó en Salta al empresario frigorífico Iván Cabezas. El imputado fue detenido en mayo y era acusado de comandar una supuesta asociación ilícita -en la habría empresarios tucumanos involucrados- dedicaba al narcolavado.
La investigación está a cargo del juez federal de Orán, Raúl Reynoso, quien había sido amenazado de muerte por el imputado. Cabezas también era acusado de amenazar al fiscal federal de Orán y al jefe de Aduanas de esa localidad. LA GACETA Salta dialogó con el abogado Marcelo Arancibia, defensor de Cabezas, quien dio detalles de la causa. “A nuestro entender (Cabezas) nunca tuvo que estar preso”, subrayó el letrado.
Arancibia también señaló que las amenazas, en realidad, fueron pensamientos de ira de su defendido, quien se las había manifestado a su esposa pero sin intención de llevarlos a la práctica. “Estaba siendo investigado y estaba siendo perseguido por comentarios de que era traficante y le dijo a su señora que iba a matar al juez, al fiscal y al jefe de Aduana, pero en realidad no lo iba a hacer”, señaló el abogado.
Arancibia agregó: “eso (por las amenazas de muerte) agudizó la detención, a pesar de que era investigado por supuestamente ser jefe de una asociación ilícita de contrabando. En un primer momento se le dictó procesamiento y prisión preventiva, y no se dio lugar a la excarcelación”.
En este contexto, Arancibia dijo que el juez Reynoso recibió una serie de informes probatorios que determinaron que Cabezas era un matarife, que “puede o no tener desprolijidades impositivas, pero que en absoluto era lo que se pensaba y por lo que fue investigado”
Por otra parte, Arancibia dijo que Cabezas fue liberado el viernes y que el próximo 5 de agosto deberá presentarse en persona en el Juzgado Federal. “Considero que va a salir de todas las imputaciones sin culpa y sin cargo porque nunca formó parte de una asociación delictiva para lavar activos del narcotráfico”, remarcó.
Bienes incautados
Arancibia adelantó que solicitará que le restituyan a su cliente los bienes que le secuestraron. “Él va a limpiar el honor. Esto comenzó con una acusación anónima, que suelen ser producto de envidias o venganzas”, concluyó.